Es normal, y sano, sentirnos de bajón de vez en cuando. En esta entrada te explicamos qué puede estar detrás del malestar psicológico .💭
Malestar psicológico:
La mayoría de las personas podemos identificar cuando algo va mal dentro de nosotros. Sabemos decir cuando estamos cansados, agobiados, tristes, nerviosos, etc. detectando el malestar psicológico. Sin embargo, muchas veces, no sabemos el por qué de estas emociones.
Las emociones no son más que un indicador del cuerpo, una señal de que algo no va como debería. Al igual que reaccionamos con dolor cuando tocamos algo muy caliente y apartamos la mano.
¿Qué nos indica el malestar psicológico?
Todos nos sentimos mal de vez en cuando. Una ruptura amorosa, cometer un error grave, enfadarse con un amigo… son situaciones que nos causan malestar. Es normal sentirse mal, no te culpes por ello. Las emociones tienen la función de ayudarnos a superar esa situación de duelo por la pérdida de la pareja o el amigo, evitan que cometamos otra vez ese error, etc. En definitiva, nos transmiten una enseñanza.
Cuando el malestar se prolonga en el tiempo puede estar indicándonos muchas cosas. Una gestión emocional deficiente, estrategias de afrontamiento a los problemas que no son las más adecuadas, distorsiones cognitivas, etc.
Esta serie de factores pueden derivar en que intentemos «callar» ese sentimiento negativo con comidas altas en calorías y azúcares, alcohol, evasión de la realidad mediante videojuegos o contenidos televisivos, etc. Estas conductas funcionan a corto plazo, porque nos dan esa desconexión y placer momentáneo que tanto necesitamos. Sin embargo, a largo plazo generan mayor malestar psicológico y físico. Esto puede acabar convirtiéndose en un círculo, y derivar en trastornos de ansiedad, depresión, alimentarios o de consumo de sustancias.
Evitar el malestar emocional a toda costa es peligroso:
Vivimos en la época de la felicidad y el positivismo constante. Seguro que estas frases te suenan: «sonríe siempre, no sabes quién se puede enamorar de tu sonrisa», «persigue tus sueños», «todo es actitud». Estas frases motivacionales, en vez de animarte a seguir adelante y mejorar tu estado de ánimo, irónicamente, pueden conseguir todo lo contrario. Es frustrante no poder alcanzar este ideal de felicidad y realización vital. No todo es actitud, no todo depende de ti, no puedes ni tienes que sonreír siempre, y no pasa absolutamente nada. Intentar estar siempre bien anímicamente hace que no enfrentemos las emociones que nos resultan más desagradables, como la soledad, la tristeza o la ansiedad. Aunque no nos resulte agradable, enfrentarnos a ese malestar psicológico, reconocerlo y trabajar en ello, es sano. Puedes leer más sobre las ventajas de las emociones negativas en este artículo.
Si sientes que estás pasando por una mala época en la que no superas ese malestar psicológico, no dudes en consultarnos, estaremos encantados de ayudarte.
