Las distorsiones cognitivas causan un malestar emocional que se reduce considerablemente si son trabajadas
Las distorsiones cognitivas son pensamientos desadaptativos, esto es: erróneos. Son formas de pensar que se basan en creencias sobre uno mismo, sobre los demás y sobre el futuro.
Son altamente frecuentes en pacientes que acuden a consulta, y su detección y manejo son fundamentales para que el cliente mejore anímicamente y se convierta en una persona autónoma que distingue cuándo interpreta correcta o incorrectamente lo que sucede a su alrededor.
Las distorsiones cognitivas más frecuentes, son:
- Catastrofismo: imaginar la peor de las consecuencias, sea en una situación: laboral, social, de salud, etc.
- Pensamiento polarizado: un diálogo interno en el que la persona suele utilizar categorías extremas (interpretar en “blanco o negro”, no existen grises): bueno Vs malo, bien Vs mal, fatal Vs genial, gustar Vs odiar, ser capaz Vs incapaz, etc.).
- Filtraje: quedarse con la parte “negativa” de una situación, en lugar de valorar también la “positiva”.
- Error del adivino: interpretación del pensamiento. Significa creer que se sabe lo que la otra persona siente y/o piensa, sin pruebas fiables.
- Y síes: generadores de miedo ante el futuro.
- Otras.
Es importante trabajar progresivamente las distorsiones cognitivas, ya que el ser humano está tan acostumbrado a dar por válidos sus pensamientos, que la identificación de las mismas requiere de práctica.
Posteriormente, se aprende a encontrar alternativas más viables a esos pensamientos.
Es importante no confundirse: lo que se pretende no es que el paciente piense siempre de manera positiva, es más, si una situación es objetivamente desagradable, pensar en consecuencia, no sería una distorsión cognitiva.
Las distorsiones cognitivas son, como indica su nombre, pensamientos que no concuerdan con la realidad en un gran número de ocasiones.
Su trabajo, requiere de esfuerzo, no obstante, una vez aprendidas las estrategias, estas se automatizan y pasan a formar parte del estilo cognitivo (manera de pensar) del paciente; éste no se centrará sólo en una posibilidad, sino que analizará, buscará y encontrará opciones alternativas.
Si deseas trabajar tus pensamientos, contamos con profesionales que pueden ayudarte a interpretar la información de manera más “acertada”. Esta tarea es importante porque la interpretación “negativa”, conduce al malestar emocional.