¿Qué áreas potenciar en el tratamiento del TDAH?
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), es una problemática del neurodesarrollo que se divide en tres categorías (según la sintomatología destacada):
- Presentación predominante con falta de atención.
- Manifestación combinada.
- Predominancia hiperactiva/impulsiva.
Las tres modalidades implican un patrón persistente de inatención y/o hiperactividad-impulsividad que interfiere con el funcionamiento y el desarrollo del menor (p.ej. rendimiento escolar); de ahí la importancia de intervenir temprana y eficazmente, priorizando y adaptando los objetivos:
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Déficits en la sincronización psicomotriz:
Es frecuente que los niños con TDAH presenten dificultades en la carencia del ritmo motriz.
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Inexactitud en la percepción del tiempo:
Tienen dificultades en la percepción temporal, desempeñándose en intervalos cortos y generando frustración en interludios o pausas transitorias que vivencian como excesivas y prolongadas.
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Escasa previsión temporal:
Conlleva que respondan a ganancias a corto plazo y abandonen premios que supongan recompensas dilatadas en el tiempo. Asimismo, les cuesta organizar las secuencias temporales de una acción, especialmente a largo plazo.
Tras realizar la evaluación y establecer el diagnóstico, nuestra intervención (enfoque multicomponente) abarcará los siguientes objetivos:
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Psicoeducación:
Orientación a los padres/tutores legales y profesores acerca de: la etiología, los síntomas, las posibles comorbilidades, el plan de tratamiento, los objetivos escalonados y el establecimiento de las sesiones de intervención y las consultas de asesoramieto.
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Tratamiento conductual:
Se trabajan métodos y se enseñan procedimientos/estrategias para que padres y profesores manejen las respuestas inadaptadas del niño: técnicas para adquirir, mantener o eliminar conductas.
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Terapia Cognitivo-Conductual:
Mediante el modelado y la resolución de problemas, el menor adquiere nuevas conductas y aprende a generar alternativas de actuación.
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Estimulación cognitiva:
Implementación de técnicas dirigidas a mejorar las siguientes áreas cognitivas:
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Atención:
Tareas de atención sostenida, actividades de atención selectiva (tanto sucesivas como simultáneas) y entrenamiento en atención alternante y dividida. El formato de estimulación varia: auditiva y/o visual, con versatilidad en la presentación de los estímulos (contraste, complejidad, intervalo temporal, distractores, formato digital o físico…)
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Memoria de trabajo:
El objetivo es potenciar la capacidad de inhibir información/conductas irrelevantes y seleccionar/emitir respuestas funcionales (internalización/asimilación de reglas y secuencias). Se emplean tareas visoespaciales, auditivas, táctiles y multiformato.
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Demora de la gratificación:
Se trabaja la impulsividad a través de actividades que desarrollan y aumentan el autocontrol y la reflexividad. Se aplican problemas con diferente configuración (p.ej. programa informático de entrenamiento especializado o juegos específicos con demora de la gratificación)..
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Habilidades Sociales:
Aprenden a relacionarse adaptativamente con el entorno, la familia y su grupo de iguales (compañeros).
Queda claro que la intervención psicológica es fundamental; intervenir en su presente es garantizarles un futuro digno. En Psica lo sabemos, y por eso nos preocupamos por la calidad de nuestras herramientas terapéuticas, contando con los programas de tratamiento específicos más actualizados y con profesionales con más de 20 años de experiencia tratando esta problemática.
Si sospechas que tu hijo/a sufre TDAH, ponte en contacto con nosotros, ¡queremos ayudaros!
«Todos los estudiantes pueden aprender, pero no todos lo harán de la misma manera» (George Evans)
